Tener conocimiento sobre temas financieros permiten tener un profundo entendimiento de cómo funciona el dinero en todos los ámbitos que se requiere como a nivel personal, familiar, empresarial, etc. Además te ofrece todas las herramientas posibles para tener una administración eficiente sobre nuestros ahorros e inversiones. Una buena educación financiera nos garantiza una calidad de vida en el presente y para nuestro futuro.
Según la definición de educación financiera por la OCDE se define que “es el conocimiento y la comprensión de conceptos y riesgos financieros, y las destrezas, motivación y confianza para aplicar dicho conocimiento y comprensión con el fin de tomar decisiones eficaces en distintos contextos financieros para mejorar el bienestar financiero de los individuos y la sociedad, y permitir su participación activa en la vida económica”.
Cuando tenemos una gestión de finanzas eficiente podemos obtener múltiples beneficios como administrar e invertir nuestro dinero de forma correcta, además de que somos capaces de tomar decisiones que están fundamentadas en conocimientos y experiencia, lo cual nos brinda la oportunidad de alcanzar una estabilidad financiera exitosa. Por otro lado también prevenimos situaciones de riesgo como estafas o endeudamiento descontrolados. Saber sobre los conceptos básicos de finanzas y economía nos brinda la oportunidad de aplicarlos en nuestra vida diaria y obtener beneficios de ellos.
Existen dos conceptos que son los cimientos básicos de la educación financiera que son: gastos e ingresos. Aunque parecen ser conceptos que no tienen trascendencia, si lo son, pues nos dan las bases necesarias para crear un presupuesto mensual o anual para poder administrar nuestros recursos económicos mejor.
Por muchos años el desconocimiento del comportamiento de nuestra moneda o de los recursos económicos en las familias ha sido una de las principales causas de las crisis financieras en el mundo. La ignorancia sobre temas económicos y crediticios ha hecho que muchas personas se vean afectadas por las crisis que mundialmente han sido protagonistas de la historia. Es un hecho que la educación financiera si bien no va a librar a un país de una crisis económica, puede prevenir que miles de familias se vean afectadas, es bien dicho que: “el conocimiento es poder”. Nosotros como ciudadanos tenemos la responsabilidad de fomentar la educación financiera en nuestros hogares y en nuestros negocios.